En la mayoría de las tortugas, el caparazón forma una envoltura con cavidades de donde salen, por delante, la cabeza y las patas anteriores, y por detrás, las patas posteriores y la cola. En algunas especies de tortugas es tan grande que la tortuga se pude esconder por completo dentro del caparazón.
La clasificación de las tortugas se basa en la forma que guardan la cabeza dentro del caparazón. Así, a las que doblan su cuello de forma lateral, se les llaman “Tortugas Pleurodiras”. Por el contrario, a las que meten el cuello hacia adentro, se les llama “Tortugas Criptodiras".
El caparazón de las tortugas es una adaptación del esqueleto (mantenida desde hace 200 millones de años), donde las vértebras se presentan en placas exteriores.
La tortuga es inofensiva para las personas y comúnmente son tímidas y recurren a esconderse dentro de su caparazón, aunque si llegan a morderte cortan como tijeras y si llega a arañarte sus pezuñas capaces de producir arañazos muy dolorosos.
Dentro de los dos grupos básicos existen también otras diferencias, finalmente agrupándose todas en unas doce familias:
a) Pleurodiras: Retraen la cabeza lateral al cuerpo
Afro-Americanas
Austro-Americanas
b) Criptodiras: Retraen la cabeza dentro del carapacho
Mordedoras
Marinas de Carapacho Liso
Marina Laúd
Carapacho Suave
Carapacho Blando
De Ciénaga
Fluvial Centroamericana
Macrocéfala
Semiacuáticas
Terrestres
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